De vez en cuando necesitamos preguntarnos las grandes preguntas en la vida: ¿Quién soy? ¿De qué se trata la Vida? ¿Para qué estoy en este mundo?
Peor que estar perdido, es creer que sabes donde estás y en verdad no ser así. La vida no decantada y con claros objetivos es igual a esta dicotomía.
"El misterio de la existencia humana no reside sólo en mantenerse con vida, sino en encontrar algo por lo que vivir"
Fyodor Dostoyevsky
¡El Corazón tiene todo que ver con ello!
La Psique y el Corazón humano
El corazón humano es un pozo sin fondo, de él pueden salir las peores pesadillas y los tesoros más inauditos. Ya C.G. Jung clarificaba en su teoría de la psique humana que no sólo se comprendía del consciente y subconsciente personal, sino que yace en ella un pozo compartido que hunde sus raíces en lo más profundo de la historia de todos las experiencias, memorias y conexiones que los seres humanos hemos hecho desde antes inclusive de emerger la consciencia, a saber, el Subconsciente Colectivo. No tengo del todo claro si el Corazón humano es el portal de acceso a la Psique o es la Psique el portal al Corazón.
La realidad es que hay un Fuego Primordial en el fondo de nuestra más profunda realidad, un testimonio de aquel Fuego que nos dio la vida e inició la consciencia en la humanidad; la chispa divina, la imagen de Dios en nosotros… el Crisol de nuestra existencia se hunde muy profundo y, no sólo tenemos acceso a él, sino que estamos inquietos e intranquilos hasta que no nos enraizamos a él y nutre nuestros avatares.
¿Cómo accedemos a dicha energía vital y vigorizante?
La estructura del corazón: las Creencias
Ya en la introducción a este ciclo (Cirugía de Corazón Abierto) mencionamos como las primeras creencias se forman por extrema necesidad y terminan siendo transparentes a nuestra consciencia, sirviendo de fundamento y abono para toda la estructura de creencias que posteriormente van formando nuestra personalidad. Así que, sin darnos cuenta, vamos tomando decisiones y actuando en el mundo, sin reconocer qué opera detrás. No es hasta que decides formular una nueva creencia y actuar sobre ella, que descubres el conflicto interno y encuentras oposición para alcanzar aquello que ambicionas.
Las creencias no son unidades o ideas sostenidas en el aire, se forman como relatos, donde nosotros nos vemos empuñando dichas creencias… nos contamos a nosotros mismos como protagonistas de dichas creencias en acción. Ese relato puede ser consciente o inconsciente. En la introducción anterior mencioné como se forman y operan cuando son inconscientes o transparentes, ahora comento cómo es cuando es “consciente”.
Las creencias modelan nuestra vida
Sé que a algunos les parecerá una tontería, pero para los amigos de mi hija adolescente, desear y conseguir un iPhone es algo crucial… nos servirá para ejemplarizar las ideas modelan nuestra vida. Para los adolescentes (y algún otro desubicado) lograr tener el último iPhone es un objetivo que amerita tener presente a cada instante disponible de nuestra consciencia.
A cada giro del día, todo le recuerda y mantiene dicho relato presente, lo ve en manos de otros en la calle, comparte con sus amigos sobre todo lo que puede hacer, celebra (quizás hasta con algo de recelo) el que un amigo lo haya conseguido. En todo, es un relato que tiene protagonista, actores de reparto, objetivo y desenlace.
La idea de quién son con el iPhone, en quien llegarán a ser poseyéndole irradia un sentido de logro y pertenencia convalidado por todo el entorno. Fallar en adquirirlo es una tragedia y hacen todos los esfuerzos para alcanzar dicho relato, a veces sin limitar lo que es correcto o justo… el relato (de “quién soy” con el iPhone) en su cabeza es más importante que todos los obstáculos para conseguirlo… y lo realmente trágico, es que al conseguirlo, al poco tiempo siento un vacío y necesito buscar otro “algo” que me “coloque” de nuevo.
Todas nuestras creencias funcionan igual. No podemos evitarlo, estamos diseñados para creer, visionar, buscar y lograr.
Cuando las creencias son transparentes, el ímpetu para alcanzar la creencia es como una corriente de resaca, no la vemos, pero nos lleva a donde la creencia nos apunta independiente de nuestra intención. Cuando es consciente, modela cómo nos sentimos, cómo experimentamos los obstáculos, inclusive qué vemos y cómo vemos lo que vemos.
El Corazón me devuelve lo que yo le alimento
En tecnología informática hay una premisa fundamental, “Garbage in, garbage out” (ES: Basura entra, basura sale). No puedes sacar algo diferente de lo que metes… el Corazón humano (o la Psique) es la tecnología más avanzada del universo, ¿Por qué no operaría esta premisa con toda su fuerza?
Si lo que constituye el corazón son las creencias, si ellas operan eficientemente para condicionar cómo ves el mundo y cómo lo experimentas, ¿cómo puedes no esforzarte por discernir cuáles son las creencias que rigen tu vida y definen la calidad de vida que puedes alcanzar?
En este escenario, ¿Qué es la fe?
Tienes fe, aun cuando no es consciente, tienes fe de que las creencias son reales y, si actúas en consecuencia a ellas, te llevarán a la conclusión del relato que la creencia que anidas en tu Corazón. “la fe es la certeza de lo que se espera, la sustancia de lo que no se ve” (Pablo de Tarso), si clarificas y defines nuevas creencias, el relato interior cambia y la fe que te hace actuar para alcanzar dicho relato, te orienta y te da fuerzas para alcanzarlo contra todo obstáculo o pronostico… opera igual que con las transparentes, porque tu Corazón modela como entiendes, percibes y operas en el mundo.
Así pues, para transformar tu vida, no dejes que una buena crisis de pierda, utiliza todo para descubrir quién eres y para qué estás viviendo…
La tristeza te prepara para la alegría. Violentamente barre todo de tu casa, para que la nueva alegría pueda encontrar espacio para entrar. Sacude las hojas amarillas de la rama de tu corazón, para que las hojas frescas y verdes puedan crecer en su lugar. Levanta las raíces podridas, de modo que las nuevas raíces escondidas debajo tengan espacio para crecer. Sacude toda tristeza de tu corazón, cosas mucho mejores tomarán su lugar.
Rumi
Empuña con determinación todas las opciones que te llevan a aceptar lo que sale de tu Corazón y reconocer, “hasta ahora he sido esto” y empuña la determinación para cambiar tu Vida, algo muy profundo en tu Corazón será tu aliado.
Próximo miércoles…
Un poema del corazón
La semana próxima haré un cambio, presentaré un poema de una canción de Lauren Daigle, una cantante que es relativamente desconocida, salvo en ciertos círculos. Ella escribe en inglés lo que posa una dificultad para mis lectores que no lo hablan fluidamente; así que pondré cada verso con su traducción.
EL PUNTO a la i
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