Ciclo LA SEMILLA DE MOSTAZA
Cómo forjar el Temple de la transformación para construir una Nación.
Esta serie de artículos va dirigida, aunque no exclusivamente, a los venezolanos dentro y fuera de nuestra tierra que formamos la nación de Venezuela. Digo no exclusivamente, porque los problemas que ha tenido tan agudamente este bello país caribeño no son exclusivos de ella, sino están representados y viven en todos los países que llamamos del primer mundo y los que están en desarrollo: los estados están desconectados de la realidad de la gente.
Los edificios que llamamos Nación son construidos con los ladrillos que llamamos Ciudadanos; no son más ni mejores que sus cualidades y temple moral.
Por ello nos disponemos a reflexionar en investigar las profundidades que nos permitan sacar de nuestra consciencia todo el bagazo que no es la semilla e ir a lo fundamental: la semilla de esperanza, fe y fortaleza que nos permite cambiar nosotros y así transformar nuestro entorno.
Creo firmemente que Venezuela va a ser el ejemplo de nación que el mundo necesita en el Siglo XXI y por ello todos tenemos que dar nuestra más y mejor parte… aun cuando en nuestra vida no veamos ni el árbol ni los frutos de dicha semilla. Ya los verán y recogerán nuestros descendientes y siempre recordarán cuanto nos deben a todos los que nos convertimos en semillas para ellos.
Artículos del Ciclo Semilla de Mostaza:
Venezuela: “No llores por mi…”
En ningún lugar es más “fácil” construir algo trascendente y duradero que donde todo ha sido devastado. Venezuela nos enseña que no esperamos a que todo esté en el suelo, sino tomemos nuestra realidad y hagamos de ella un ladrillo para construir una Nación.
¡Una decisión es la diferencia entre el cielo y el infierno!
Descubre dónde yace la grieta por donde puedes comenzar a dilucidar la fuerza y determinación para construirte y apoyar los tan importantes cambios que necesita nuestro precioso mundo.
¿Por qué una nación es una empresa espiritual?
Nada más importante que reflexionar sobre la vida, lo que nos une y cómo vernos en medio del aparente desorden que todo representa... porque si tú cambias y aprendes a ver qué es importante... reconoces las perlas que hay y apoyas para que ellas sean conocidas.